La creatividad y el Lenguaje Artístico-Plástico. (Conferencia)

La creatividad y el Lenguaje Artístico-Plástico. (Conferencia)

Tal como prometí, dejo el material de la conferencia que dí en la Universidad de Sevilla el pasado Viernes para la Semana de la Poesía, con los nervios hay cosas que se me quedaron en el tintero y surgieron otras nuevas, pero igualmente me lo pasé muy bien, fue algo especial y creo que pudimos disfrutar de aquel momento todos los presentes. Espero que les guste, queridos lectores, fue un honor estar ahí:


Ésta foto fue durante mi ponencia, mientras hablaba de conciertos ilustrados.
De izquierda a derecha, los conferenciantes por especialidades:
Marcos Neroy (Musicalizador de poemas), Leila Amat (Fotografía creativa)
Javier Helgueta (Moderador) y Eve Mae (Ilustradora compulsiva)
LA CREATIVIDAD Y EL LENGUAJE ARTÍSTICO
Partiendo de la base de que la creatividad es un proceso universal y de que vale para todas las facetas del ser humano, la creatividad puede ponerla en práctica cualquiera, no tiene por qué estar relacionado con las Artes. Ésta, es para mí una de las facetas comunes en la relación entre unas especialidades y otras, la creatividad es una raíz, y las Artes o el oficio que tengamos, hace que hablemos un mismo lenguaje a través de diferentes canales.
INTRO-BIOGRAFÍA
¿Quién soy? Me llamo Eve Mae, soy ilustradora, diseñadora y actualmente trabajo como dibujante de cómics.

¿Desde cuándo dibujo? Creo que no dejé de hacerlo nunca.
Desde siempre he sido bastante inquieta, y, todo lo que he ido aprendiendo me ha gustado ponerlo en práctica a la par que me iba formando, me gusta probar mis capacidades y encontrar un sentido útil de todo lo nuevo que voy asimilando para afianzarlo como una habilidad más en mi trabajo. Soy partidaria de ir aprendiendo a base de ensayo y error, que es como se aprende mejor éste oficio.

Acerca de las técnicas que utilizo para plasmar mis dibujos, me gusta complementar las técnicas tradicionales ya sean en medio seco o húmedo  (acuarelas, lápices, carboncillo, acrílicos tinta…)  con el entorno digital, no me gusta independizarlas;  escaneo mis trabajos, utilizo tabletas digitalizadoras, y como software de dibujo, mayormente me defiendo creando una buena paleta de pinceles en Photoshop, que me ofrece posibilidades infinitas para pintar o utilizo Sketchbook  para los bosquejos y los trabajos más rápidos.
Ahora mismo el boom de la era digital está siendo muy beneficioso para los artistas, porque nos comunicamos entre nosotros, evolucionamos mucho más rápido que antes cuando se dependía de un único maestro de taller, tenemos influencias de todo tipo y aprendemos unos de otros estando en cada punta del mundo.

Desde el inicio de mi formación en Artes, cuando llegó mi primera conexión disponible a internet… si no me equivoco tenía unos… 15 años, ya me empecé a mover haciendo encargos sencillos de diseño, mini trabajos de logotipos (dibujaba con el ratón del ordenador), buscaba clientes por tuenti cuando aquello estaba de moda; En aquel momento, mis amigas se tiraban fotos y yo me entretenía en buscar clientes para vender retratos y diseños , encontré un filón para dar a conocer mi trabajo sin moverme de casa…  hacía y pensaba en ese tipo de cosas; después, tras el Bachillerato de Artes, de los 17 a los 18 empecé a estudiar en el Ciclo Superior de Ilustración, ese mismo año accedí al Máster de creación de Books de ilustración y diseño Gráfico y empecé con otros trabajos pequeños como ilustradora de publicidad; a los 18, durante esa misma etapa,  me atreví a pedir permiso para dibujar conciertos en directo, aquello me empezó a proporcionar muy buenos contactos y futuros clientes y marchó bastante bien, además, ésta inquietud coincidió con que por fin legalmente podía acceder a salas de conciertos y esto desencadenó en mi fase artística más importante, ya que fue cuando fui a descubrir el mundo artístico desde el punto de vista de otros artistas, bajistas, compositores, cantautores, grupos de rock …  es ahí donde me di cuenta de que contábamos cosas, lanzábamos mensajes que poseían un mismo lenguaje y  lo único que los diferenciaba era el canal intermediario que utilizábamos para lanzarlos al público.
Después llegué a la Escuela Joso de Barcelona a los 19 años, conseguí entrar directamente en 4º curso de Artes Gráficas y allí comencé a introducirme en el mundo del cómic, aprendí las claves de la Narrativa y las fui trabajando mientras descubría los Salones del Cómic y del Manga,  antes de terminar mis estudios ese mismo año, ya estaba preparando mi primer cómic para publicar en los Estados Unidos  como colorista en The Westwood Witches, que salió el pasado Noviembre. Ahora mismo estoy trabajando en el cómic Hacker Épico, adaptando una novela negra a viñetas como guionista y dibujante.

Al cabo de poco tiempo de entrar en contacto con ese mundillo me di cuenta de que la relación entre las especialidades artísticas convergía, colisionaba en el querer contar algo, como fuese,  contar una emoción, un sentimiento, una historia, incluso desahogarse emocionalmente. Y es bien probable que, lo que vosotros contéis con letras, yo lo cuente con puntos, vuestras palabras, son mis trazos, vuestros versos mis personajes y mis fondos, vuestras rimas, la composición en la narrativa de mis páginas, vuestras estrofas son mis viñetas, y finalmente, vuestro poema, es mi página de cómic.

Gracias por vuestro tiempo.

Bloqueos artísticos. El trabajo de la mente.

A veces, en una profesión creativa como puede ser la de ilustrador, diseñador, dibujante de cómics… cuando nuestra mente de homínidos exigentes respecto a lo que queremos ver y nuestras habilidades no están coordinadas, se produce lo que llamamos «BLOQUEO ARTÍSTICO», me explico:

La curva de aprendizaje de los ilustradores tiene dos componentes que están en constante evolución a lo largo del tiempo, «lo que queremos ver» y «nuestras habilidades motrices»; durante el trabajo, nuestra mente valora a cada instante lo que estamos haciendo, cada trazo, cada mancha, lo ideal sería evolucionar de una forma paralela ambas cualidades, pero para crecer en el mundo de las artes creativas eso es imposible, el profesional se sorprende a cada instante y ese toque de «locura» que todos tenemos hace que éste sea un trabajo interesante. Una progresión sin altibajos sería peligrosa, ya que si en todo momento todo lo que hemos hecho nos pareciese correcto querría decir que estamos estancados, que no evolucionamos.

Normalmente nuestras habilidades motrices mejoran con la práctica, y nuestras exigencias tienden a aumentar con el progreso.

Si lo que tenemos delante de nosotros está siendo valorado como positivo, eso quiere decir que nuestras habilidades como ilustradores, están un poco por encima de lo que nuestro ojo estaba preparado para ver, en ese momento el dibujante o el artista creativo se encuentra muy bien, ha superado sus propias expectativas, es feliz, sigue adelante, pero sin darse cuenta su visión va a hacer que en un futuro cercano llegue una fase de súper-exigencia debido a que las expectativas sobre lo que se quiere ver en el papel han aumentado de golpe mucho más de lo que lo han hecho sus propias habilidades, justo en el momento que nuestras exigencias visuales se posicionan por encima de nuestras habilidades se produce un bloqueo creativo, pensamos «¡¿¡Pero qué ha pasado!?! ¡si yo antes molaba! ésto es feísimo, qué horror… no sirvo para ésto». Éste es un estado mental que frena temporalmente el crecimiento de nuestras habilidades motrices ya que hace que nuestro interés baje, practicamos menos y aprendemos menos cosas en un tiempo más prolongado debido al miedo que tenemos de fracasar en nuestro siguiente intento; ésto, puede llevar a que no dibujemos durante horas, días, semanas…
El descanso en un momento así puede ser bueno, pero lo más recomendable sería dibujar sin miedo, que no nos preocupe si hacemos un dibujo un poco peor que lo que esperábamos, podremos aprender de esos errores para seguir avanzando. Cuando conseguimos seguir adelante nuestras habilidades vuelven a acercarse a lo que esperábamos de nosotros en un principio, nos volvemos a sorprender y después de pensar que somos la caña volvemos a caer, pero tenemos que recordar siempre, que ésta caída será para volver a levantarnos. No podemos dejar que las emociones nos dominen al cien por cien, ya que sino, el miedo se apoderaría de nosotros y dejaríamos de dibujar; hemos de recordar que nuestras habilidades no han desaparecido, siguen ahí, solo es que no sabemos encontrarnos con ellas en ese momento. No debemos temer el bloqueo ya que va a estar presente en muchos momentos de nuestra vida creativa, si fluimos con él y seguimos dibujando poco a poco todo volverá a la normalidad.

On-line hay algunas páginas que proponen ejercicios de re-disposición para dibujar, garabatear, hacer actividades creativas. Yo os recomiendo los cambios de rutina, hacer actividades que no acostumbremos a hacer y sobre todo, vigilar nuestro «ritual» antes de dibujar para volver a emocionarnos cada día con nuestro trabajo.

Si queréis seguir investigando sobre el tema os recomiendo que echéis un vistazo al canal de Sycra, que lo expone de un modo algo más completo, es un Concept Artist bastante bueno para mi gusto; la única pega para quienes no lo hablen es que está todo en inglés, pero aún así comparte con sus seguidores grandes recursos y reflexiones muy interesantes.

Besitos a todos.
-Eve Mae-

Una mirada en el tiempo: Cómics y otros hitos. La importancia de fracasar.

Una mirada en el tiempo: Cómics y otros hitos. La importancia de fracasar.

A veces es bueno pararse a reflexionar, dejar las prisas a un lado y hacer una valoración de lo que se tiene para poder afilar las armas y seguir adelante. Pues bien, me encuentro en ese punto de reflexión y me gustaría compartirlo con todos vosotros.

Dentro de poco hará dos años desde que me embarqué en una aventura llamada CÓMIC, a primera vista una locura, sin haber hecho nunca nada relacionado con ello y proviniendo de un lugar donde éste género está a medio demonizar, me armé con mis conocimientos de ilustración y me largué a Barcelona a fracasar, sí, como lo leéis, así, sin anestesia ni nada, mi idea en un principio era esa: llegar, estrellarme contra todos los muros, darme de bruces el mayor número de veces posible en el periodo de tiempo que estuviese allí, llegar a mi límite, a las instancias más oscuras del fracaso.Y así lo hice.
Entré directamente en 4º curso explorando un mundo totalmente desconocido para mi y fracasé estrepitosamente durante un período considerable, mi talento para fracasar era increíble, pero, tras unas semanas, después de aquello, el fracaso iba dando sus frutos y mi estrategia también: En un tiempo récord aprendí lo que no tenía que hacer. Y a partir de ahí… comenzó la mejor parte de la historia: aprender de los grandes profesionales que me rodeaban. A decir verdad toda mi experiencia por el Norte fue increíblemente productiva, desde los conciertos ilustrados hasta la última viñeta que hice en la mesa de la clase de Aerografía (donde aprendí Narrativa). Cierto día, poniendo en jaque mis habilidades me tocó entintar. ENTINNNTAAAAAAR esa palabra que despierta pavor entre los alumnos de Art Gráfic, que piden aprender tinta hasta en la hora del bocadillo. Pues bien, entinté mis primeras páginas con la mayor dignidad que pude y… oh, maravillosa casualidad. Subí la foto de la hazaña a facebook y mi futuro compañero de batallas comiqueras dio conmigo.

El hecho de viajar sin miedo (pero con una precaución inteligente) de fracaso en fracaso me llevó al principio de mi aventura profesional y a lo que se tradujo posteriormente en publicar como Colorista en Estados Unidos mano a mano, nada menos que con Roger Bonet (Inker en Marvel haciendo Avengers, Age of Ultron… y en otras series bastante reconocidas) también ha desencadenado otra serie de sucesos positivos a nivel profesional que ya os contaré.
Mi filosofía de vida, desde siempre ha sido la de perseverar y aprender de mis propios errores, eso sí, cada error ha de ser diferente del anteriormente cometido, son errores con puntería, ¿cómo puedo pensar ésto? Pues lo tengo claro, si no tengo nada, nada tengo que perder, y equivocándome, sencillamente gano, me llevo experiencia. Creo que para crecer, es una pérdida de tiempo dedicarte a lo que ya sabes hacer, el camino seguro está bien, pero hay que darle algo de emoción de forma gradual para que tenga sentido, hay que salir de «La zona de Confort».

Hay quien hablaría de finales felices, para mi ésto es tan solo el comienzo.

Portada de la edición en Castellano a la izquierda, en su interior incluye una de las estampas de Goya dibujada por mi.
A la derecha, el cómic que salió en la edición Americana coloreada por mi.
Créditos de la obra «The Westwood Witches #3»
Aquí pongo un link por si quisierais comprarlo o ver el preview de las páginas.
http://digital.comicsplusapp.com/series_comic_details.php?product_id=com.iversecomics.amigo.comics.westwood.witches.three.english.11052013
¡Besitos ilustrados!
Y ya, os dejo al tanto también de que estoy preparando un nuevo trabajo como Autora y Guionista; acabo el post como acaban las buenas series:
CONTINUARÁ…

Reflexiones: Tener un don y trabajar gratis.

De entre los muchos tópicos que nos persiguen, uno de ellos es el que relaciona nuestras capacidades artísticas con algún tipo de brujería extraña, muchos lo llaman «tener un don».
Cuando la gente me veía dibujando en conciertos o en algún evento, más de una vez me han dicho aquello de «Oyoyoy es que los que hacéis ésto tenéis un don», en ésta ocasión era el bocata pre-concierto lo que se me atragantaba, me recorría un escalofrío de arriba a abajo y de abajo a arriba porque ya sabía lo que venía después.
Puede que pienses… no, ¡pero si eso es un halago! Claro… pero el niño que aprende a escribir o a montar en bicicleta no lo hace por iluminación divina; con ésto pasa exactamente igual.
Pues bien, la frase continuaba con un «¿Me haces un dibujo gratis, que no te cuesta nada?» En ese momento el hombre de Vitruvio se retorcía de dolor con sus 4 brazos y 4 piernas agarrado a su circulito, rogándole a Da Vinci para que devolviese a ese tipo un lifting en forma del mayor libretazo de la historia. Frenando mis impulsos más primitivos y guardando mis modales respondía que no.
(Primero te dicen algo bonito, y luego te piden que les dibujes gratis, qué avispados, ¿eh?)

Ninguno se paró a pensar en el tiempo y el dinero que pudo haberme llevado aprender a dibujar aquellos sketches en un par de minutos, (¿Dinero? ¡Sí, señores, las enseñanzas y material artísticos valen una pasta!) tampoco pensaron en todas las mañanas, tardes y noches completas que pude haber estado trabajando para llegar a obtener ese tipo de resultados que estaban viendo en aquel momento.
Éste trabajo requiere de muchísimas horas de esfuerzo y concentración, no hay secretos ni magia, sólo trabajo.
El hecho de trabajar gratis es una elección, pero daña nuestra imagen y algo más importante que la fama de cualquier dibujante, nuestro prestigio y nuestro futuro.
Yo no trabajo gratis, ¿Y tú?

¡Saludos!
Pasen un feliz Martes.

Reflexiones: Creatividad y fantasía

¿Es lo mismo la creatividad que la fantasía? ¿Por qué ligamos la creatividad con la niñez?
Éstas son preguntas interesantes que casi nadie se hace cuando trata con personas que se dedican al mundo de las artes, son términos ligados que a menudo confunden y desatan toda nuestra crispación.
En más de una ocasión me he encontrado con personas que me han soltado hablándome despacio y con una mirada tierna de esas de las que se usan para hablar con los niños pequeños un «Oh, cómo envidio tu mundo de fantasía, vosotros los artistas… que lo hacéis todo con esa imaginación.»
En ese instante se me atraganta hasta la tostada del desayuno y me pregunto ¿en serio me ha dicho eso?.
Pues bien, para evitarnos visitas a urgencias y posibles infartos creo que es menester que sepan que  la fantasía tiene una naturaleza espontánea, son pensamientos o imágenes mentales que aparecen por que sí y la probabilidad de que sucedan o existan en el mundo real es muy limitada.
(Ejemplo 1: Imagina que el suelo de baldosas se convierte en lava y vas galopando sobre una gallina que es un caballo alado)
(Ejemplo 2: Quiero un logotipo que me sirva de cartel, imagen corporativa, que tenga colorines y que sea una página web.)*Ej. 2 Basado en clientes reales y sufrido en propias carnes*

En cambio la creatividad es una cualidad que nos permite resolver problemas (acciones cotidianas p. ej.) desde varios puntos de vista, creando muchas soluciones que puede que no hayan sido propuestas todavía pero que igualmente son válidas.  La creatividad esconde una reflexión resolutiva, es decir, piensas, descompones el problema en varios problemas más pequeños y luego te enfrentas a ellos solucionándolos con varias ideas diferentes.

Sí, amigos, la cabeza de los creativos y creativas funciona así, y cuanto más lo haces más fácil te resulta después. Lo mejor de todo es que el que es creativo puede serlo en cualquier oficio, no solo en el artístico, Matemáticos, Informáticos… y ese toque de creatividad sumado a la pasión puede desencadenar resultados muy positivos incluso divertidos.
Aquellos que no lo entienden lo atañen a la niñez, relacionan éste proceso con la única etapa de su vida en la que ellos fueron creativos y lo enfocan de forma negativa debido a su frustración por el miedo a equivocarse o a que rechacen sus ideas -gracias a éste sistema educativo que se alimenta de la falta de creatividad- tal como les enseñaron en su más tierna infancia.
Ellos creen lo siguiente: Creatividad=fantasía=niñez=persona inmadura e infantil.
Entonces: Persona creativa= Persona inmadura e infantil. Lo cual es totalmente incorrecto.
Que juzguen tu personalidad por una de las cualidades que ligan a tu trabajo… es un error

¿Puede ser una persona creativa más feliz que una que no?
Yo pienso que sí.

Sean felices, o sean creativos para serlo.
Saludos:
Eve Mae. 🙂

0
    0
    Mi Cesta
    Tu cesta está vacíaVolver a la tienda