¡Hola, querido/a visitante!
¿Alguna vez te has preguntado qué es eso que hace falta a un ilustrador para marcar la diferencia, qué valores comparten los buenos ilustradores o por dónde hay que empezar para ser un buen ilustrador?

Hoy vamos a dedicar un momento a resolver esas preguntas con éstos diez mandamientos del buen ilustrador freelance que resumen partes del carácter y hábitos que comparten con frecuencia los buenos ilustradores y os daré unas cuantas recomendaciones para que podáis entender y poner en práctica algunos de esos hábitos.

  1. Si no sabes algo investigarás. Los buenos ilustradores comparten una actitud en la que predominan optimismo, valentía y decisión, pero para poder aplicar esos valores hace falta formación y talento. Una vez tengas eso, tendrás que confiar en ti, enfrentarte a tus dudas y aprender a convivir con tus propios miedos.
  2. Respetarás al resto de compañeros/as ilustradores de la comunidad y sus respectivas obras.
    Da igual el nivel que tengan los otros, menospreciar o faltar el respeto a otros no te convierte en mejor profesional.
  3. Serás constante.
    A los buenos ilustradores casi siempre los verás con el lápiz o el boli en la mano. Para convertirte en ese ilustrador/a que sueñas ser, es preciso trabajar a diario y construir un hábito que te ayude a mantener en forma tu creatividad y tus habilidades de dibujo.
  4. Tomarás notas y darás soporte a tus ideas.
    Desconfía de tu memoria y lleva siempre contigo una libreta o un dispositivo sobre el que anotar tus ideas, proyectos, encargos… porque las ideas vienen y van, y si no las coges al vuelo, se pierden por el camino y acaban por aparecer en la mente de otros.
  5. Tus ídolos serán una fuente de inspiración, no un motivo de frustración.
    Que otro artista sea bueno no te resta calidad.
  6. Aceptarás el error como parte del proceso.
    Harás dibujos feos, muchos, luego ocasionalmente saldrá alguno con el que estarás contento/a. Tendrás que aceptar el error como parte del proceso, todo ilustrador hizo en su día una cantidad ingente de dibujos horribles antes de que le saliese uno decente. Tú no vas a ser menos, pero te darás cuenta de que no pasa nada. Todo esto forma parte del aprendizaje.
  7. No te tomarás los rechazos editoriales ni las críticas artísticas como una ofensa personal, sino como una señal para aprender o mejorar.
    Te va a tocar convivir con las críticas y practicar la resiliencia1 para poder convertirte en un mejor ilustrador/a.
  8. No plagiarás, firmarás, ni venderás como tuyas las fotos o ilustraciones de otros profesionales.
    Respeta las leyes y el trabajo de los otros o tu carrera no alcanzará ni a despegar.
  9. Cuidarás lo que publicas en tus redes sociales.
    Si quieres que la ilustración sea tu modo de vida olvídate de subir esas fotos de la última fiesta en la que estuviste, a tus clientes no les interesa. Es importante construir y mantener una imagen limpia en las redes sociales porque se van a convertir un una herramienta esencial para dar a conocer tu trabajo y captar clientes.
  10. Crearás métodos de organización para tu día a día.
    ¿Seguro? ¿Pero los artistas no son unos bohemios? Algunos sí, los se dedican a ésto como hobby. Si quieres ganar tiempo, convertirte en un ilustrador profesional de verdad y que te vaya bien es muy recomendable que lleves una agenda al día y que construyas y respetes tus propios horarios.

Si quieres llegar a ser un/a ilustrador/a profesional algún día, antes que convertirte técnicamente en un erudito te hará falta ser buena persona. Será mejor que te lleves bien con la gente que te rodea, que actúes con educación y cautela, trabajando para que lo que dibujas hoy sea mejor que lo que hacías ayer, sin la necesidad de compararte o dañar a otros para ascender. Si se te da bien y además es algo para lo que sientes que has nacido ten mucha paciencia y resiste, esto es una carrera de fondo en la que no sabes quién puede convertirse el día de mañana en tu editor ni quién te tenderá la mano en el momento más complicado de tu carrera… o incluso de tu vida.

En mis siguientes posts profundizaré en todo esto que os cuento para que lo puedas aplicar y te contaré los métodos que mejor me funcionan a la hora de organizarme en mi día a día.

¿Quieres saber más? ¿Crees que éste contenido es mejorable? Si tienes sugerencias escríbeme. ¡Las críticas constructivas son siempre bienvenidas!

Muchísimas gracias por tomarte el tiempo de leer mis letras. 🙂

Nos leemos el próximo sábado.
Un abrazo,
Eve Mae.


1Resiliencia:
Del ingl. resilience, y este der. del lat. resiliens, -entis, part. pres. act. de resilīre ‘saltar hacia atrás, rebotar’, ‘replegarse’.
1. f. Capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos.
2. f. Capacidad de un material, mecanismo o sistema para recuperar su estado inicial cuando ha cesado la perturbación a la que había estado sometido.

 

Definición extraída del diccionario de la Real Academia Española: http://dle.rae.es/?id=WA5onlw